Si vamos a emprender un proyecto empresarial, es fundamental minimizar los riesgos. Además, si vamos a llevarlo a cabo en tiempos de incertidumbre como ocurre en la actualidad, es necesario hacer de la necesidad, virtud.
Para ello, lo más recomendable es conocer todas las características particulares de la finca y, en cualquier caso, contar con asesoramiento especializado, de la mano de expertos como Agbar Agriculture, para trazar una hoja de ruta acertada, que nos permita una gestión óptima durante todas las fases del proyecto, desde los estudios de viabilidad hasta el acceso a las mejores condiciones de financiación y la obtención de una rentabilidad adecuada que garantice la amortización, la supervivencia de la iniciativa y nuestra calidad de vida.
La agricultura es un sector ideal para cumplir con estas expectativas. Es una actividad estratégica, con un gran potencial de negocio y una elevada rentabilidad, alejada de la volatilidad y la especulación, con una gran capacidad de adaptación y resiliencia, con una apuesta continua por la investigación y que basa su desarrollo futuro en la sostenibilidad, desde todos los puntos de vista, económico, social y medioambiental, en armonía con su entorno y contribuyendo a fijar la población al territorio, convirtiéndose en la mejor medida de protección frente a incendios.
Sus características sitúan a la agricultura como uno de los sectores más atractivos para invertir en la actualidad. Más aún, si el inversor va acompañado de un aliado estratégico que guíe sus pasos y diseñe la óptima hoja de ruta del proyecto. Agbar Agriculture es el socio ideal para desarrollar un proyecto agrícola con éxito, minimizando el riesgo en la toma de decisiones, gracias a sus soluciones integrales HECUS (High Efficiently Cultivation System), enmarcadas en su especialización en asesoramiento para una agricultura sostenible y rentable.
HECUS es el sistema de cultivo de alta eficiencia desarrollado por Agbar Agriculture gracias a su amplia experiencia en la gestión de proyectos agrícolas integrales, llave en mano, basados en cultivos de alto valor añadido, que apuestan por una agricultura más moderna, competitiva y sostenible, optimizando el uso de los recursos, principalmente, el suelo, el agua y la energía.
Un ejemplo de este sistema es el proyecto que ha gestionado Agbar Agriculture en el municipio oscense de Sariñena. Se trata de una explotación de almendro, para cultivar variedades Avijor, Marinada y Belona, en una finca de 140 hectáreas de superficie, con un marco de plantación de 6×5 metros.
Agbar Agriculture ha implementado sus soluciones integrales HECUS en este cultivo de almendro de alta eficiencia en regadío, asesorando y guiando al promotor en todas y cada una de las fases hasta su puesta en marcha, desde la búsqueda de la finca, los trabajos de preparación y adecuación del terreno y la gestión de las mejores condiciones posibles para la financiación, hasta la entrega del proyecto llave en mano, con un sistema de riego inteligente y fertirrigación, así como el acompañamiento posterior para llevar a cabo todas las tareas que conlleva la gestión integral de la explotación.
De esta forma, Agbar Agriculture ha plasmado en esta explotación de Sariñena su gama de servicios especializados y diferenciados. Ha analizado la idoneidad agronómica de la finca elegida para un cultivo de alto valor como la almendra, con una demanda creciente en los mercados y un precio rentable para el productor que apuesta por diferenciarse con variedades de calidad y una óptima gestión, apoyándose en la modernización y la digitalización de los procesos y las prácticas agronómicas, lo que le proporcionará la mayor productividad y eficiencia posibles.
Este modelo de negocio se enmarca dentro de la filosofía de Agbar Agriculture por impulsar un modelo de agricultura sostenible, dando respuesta a los retos que debe afrontar el sector, con unos elevados costes de producción, derivados de las tensiones logísticas internacionales y, más recientemente, las consecuencias de la guerra de Ucrania y la inflación; la creciente competencia de los mercados; las bajas cotizaciones de los productos en origen; y contribuir a paliar los efectos del cambio climático, optimizando el uso de recursos (suelo, agua, energía) y a favorecer la biodiversidad y la salud de los ecosistemas donde desarrolla su actividad, en línea con las directrices promovidas por la Unión Europea, principalmente, la estrategia europea de biodiversidad, la nueva PAC, Green Deal y Farm to Fork.